Cuerpo


Tengo grabado en la piel a quien ame y a quienes se atrevieron a amarme.
Agarrado de la mano derecha al niño que fui, preguntándome repetidas veces si estamos proximos a llegar.
Mis piernas van de aquí allá, evitando regresar a los lugares donde fui feliz.

Corazón de sal y espuma.
Encerrado en el pecho un animal herido.
En la cabeza colibríes que pelean contra mis dudas.
¿será que tendremos paz hasta que todos estemos juntos bajo tierra?
Quien no quisiera arrancarse la mano donde habita la nostalgia o los ojos donde habita la memoria; y así partirse como juguete maltrecho.

Ayer nos propuse una tregua para que se permita utilizar todo mi cuerpo para amar un día.

Aunque sea sólo un día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario